El deporte es una actividad que contribuye a nuestro bienestar físico y emocional. Sin embargo, cuando el deporte es una adicción se convierte en un problema que deteriora diferentes áreas de vida (personal, familiar, social…).
Cada vez hay más personas que realizan deporte pero su práctica escapa a su control y sus ejercicios deportivos acaban siendo el eje central de su vida, causando graves consecuencias.
Las personas adictas al deporte se sienten intranquilas, irritables, enfadadas… si no pueden hacer deporte. Es más, les resulta prácticamente imposible, aunque sea por un sólo día, dejar de realizar sus prácticas o ejercicios deportivos. De esta forma, actividades que antes sí les resultaban satisfactorias, dejan de realizarlas y cada vez, dedican más horas y energía al deporte, aunque tengan que dejar de salir con los amigos, ir al cine, estudiar, etc.
La adicción al deporte hace que las personas «enganchadas» se sientan tristes o culpables si no hacen ejercicio o deporte, aunque sea por poco tiempo. Todo ello, altera sus relaciones familiares y sociales e, incluso, llevan a cabo sus prácticas deportivas, a pesar de las molestias físicas o de no estar completamente recuperadas de lesiones o enfermedades y provocarles fatiga y/o disminución en el rendimiento académico o laboral.
Es importante detectar precozmente el problema. Hacer deporte es una actividad muy saludable pero si la persona es incapaz de dejar, aunque sea por un día, de practicar deporte, probablemente haya desarrollado una conducta adictiva: la adicción al deporte.
Consuelo Tomás Benlloch. Instituto Valenciano de Ludopatía y Adicciones no Tóxicas. Adicción al deporte. Tratamiento de la adicción al deporte, Adicciones Valencia.
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