La ludopatía o adicción a los juegos de azar es un problema psicológico que hace la persona que lo padece no pueda resistir el impulso a jugar, a pesar de todos los graves problemas en el área personal, de pareja y/o familiar, económica, etc. La ludopatía, al igual que sucede con otras adicciones, es un trastorno que no se hace de un día para otro, sino que implica un proceso que abarca diferentes fases. Las fases de la ludopatía, las podemos resumir en las siguientes:
- Fase de Ganancias: En esta fase la persona todavía no tiene problemas con el juego porque la persona es un jugador «social». El jugador social controla tanto la cantidad de tiempo como dinero invertido. En esta fase, se empieza tomar contacto con el mundo del juego. Pese a no tener todavía problemas de ludopatía, el hecho de que el juego se utilice como una forma de diversión o de evasión y, alguna vez, se gane dinero, genera expectativas o creencias erróneas, pensando que si se continúa apostando dinero en los diferentes juegos de azar, se podrá ganar más dinero y se continuará siendo afortunado.
- Fase de Pérdidas: En esta fase la persona jugadora no puede parar o reducir su impulso a jugar y se convierte en un jugador «patológico». La persona ya no juega fundamentalmente porque se lo pase bien, sino porque necesita recuperar el dinero perdido. Como quiere recuperar el dinero, juega más, lo que le conduce a más perdidas que quiere compensar jugando más… entrando en un círculo vicioso de autodestrucción. En esta fase, la persona pide dinero prestado de diferentes fuentes (amigos, anticipos de nómina, financieras de préstamos rápidos…) sin el conocimiento de la familia y/o vende objetos o propiedades personales para obtener financiación para jugar. En algunos casos, puede llegar a coger dinero de la familia e, incluso, de la empresa en la que trabaja perdiendo el trabajo y teniendo problemas con la justicia. En este momento se oculta a familiares y allegados la situación, jugando a escondidas y mintiendo sobre el tiempo y cantidades de dinero gastadas en el juego. La pérdida de empleo, problemas legales, cambios de humor… de una forma y otra, ponen finalmente al descubierto el problema y la persona se compromete a no jugar más.
- Fase de Desesperación: Aunque en la fase anterior, la persona con ludopatía acaba reconociendo el problema o siendo descubierta por la familia, asegura que no va a jugar más, continúa jugando, aumentando las pérdidas, desconfianza de sus allegados y entorno… La familia se siente desbordada porque, pese a intentar ayudar el jugador, éste continúa invirtiendo dinero en el juego, endeudándose y ocultando lo que hace. Motivo por el que es frecuente que se produzca la separación de la pareja, pueda haber algún intento de suicidio o problemas con la justicia.
Es importante que tanto la persona que juega como sus familiares detecten precozmente el problema y busquen tratamiento psicológico especializado lo antes posible, para evitar que el problema se cronifique y evitar recaídas.
Consuelo Tomás – Instituto Valenciano de Ludopatía y Adicciones no Tóxicas – Tratamiento de la ludopatía – Ludopatía – Juego patológico – Adicciones Valencia – Psicólogos Valencia
Muy bueno el artículo. Esta claramente explicado.
Saludos necesito referencias cientificas de este tema para mi dicertacion doctoral. Buena articulo.gracias