Tanorexia o la obsesión por estar bronceado. Foto Consuelo Tomás 05-07.2015. Adicciones Valencia. Conductas adictivas       Muchas personas están disfrutando de sus vacaciones. Es un momento de relax, de disfrutar con la familia, incrementar actividades que el resto del año no podemos hacer todo lo que quisiéramos (quedar con amigos, viajar, ir a la playa, levantarnos más tarde, etc) y, como no, tomar el sol tumbados en nuestras toallas o hamacas en la playa o de senderismo por la montaña. Sin embargo, tomar el sol para querer estar bronceado, en algunas personas se convierte en un trastorno psicológico, denominado tanorexia.

          La tanorexia o la obsesión por estar moreno o bronceado, se puede enmarcar dentro de las conductas adictivas. Las personas con tanorexia necesitan  broncearse, ya sea tomando el sol,  en centros de estética con rayos UVA utlizando productos para acelerar su bronceado y, no pueden controlar su   necesidad de estar bronceados, a pesar de poner en grave riesgo sus salud física y emocional.

          Son personas que nunca se ven suficientemente morenas o bronceadas y condicionan su autoestima y relación con los demás al hecho de estar morenos (por ejemplo, creen que dependiendo del color de piel, tendrán y serán más valorados por sus amistades y relaciones).

          La tanorexia hace que las personas que la padecen no se sientan a gusto con su color de piel  siempre necesitan estar más morenos -nunca es suficiente-.  A pesar de estar cada vez más morenos, ellos se ven pálidos. Es más, si no pueden tomar el sol o darse sesiones de Rayos UVA, sienten ansiedad pueden desencadenar un síndrome de abstinencia, si no consiguen tomar el sol o darse sesiones de rayos UVA.

      Ponerse morenos,  se convierte en el objetivo de sus vidas,  descuidando otras facetas de su vida y creando problemas en el área personal, social, de ocio, etc.

       Sin embargo, a pesar de los graves problemas que les ocasiona, las personas con tanorexia no reconocen que tienen un problema psicológico. Son personas que acuden al dermatólogo debido a los problemas cutáneos por la excesiva exposición al sol o Rayos UVA (arrugas, manchas, lunares…a tumores cutáneos o melanomas) y, es este especialista el que las deriva al psicólogo.

       Es importante que la persona con tanorexia reconozca que tiene un problema o que sus familiares lo detecten para buscar un tratamiento psicológico especializado, indispensable para solucionar este problema. A través de la terapia, se trabaja la distorsión en la percepción de su cuerpo y color de piel, mejorando su autoestima en base a otras cualidades y formas de relación con su entorno y allegados y se tratan todos los factores que, directa o indirectamente, están afectando a cada persona en particular.

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